Yeyesco

Ando en mi trabajo, más tranquila que de costumbre y vi una coquita enfrente de mi, le di un trago y recordé mi infancia....si se lo preguntan, si en mi familia siempre hemos tomado refresco de cola, de esa marca roja.
Oh sí! Recuerdo todos los juegos, tus las traes, escondidillas, SALVACIÓN por todos mis amigos!...
No salgas de noche por el robachicos :S
Cuando con un peso podías comprar el mundo.
En la primaria, la hora del recreo y la semana de hacer guardia, era la onda poner a recoger 5 papelitos a quienes anduvieran corriendo, por una semana sentía el poder de un policía: D
Podíamos a salir a jugar los viernes pero antes de que oscureciera, recuerdo también que antes había más niños en la calle, juegue que juegue, brinque que brinque, ahora juegan a la guerra en el xbotss xD o cosas por el estilo :(
Había muchas posadas, piñatas, celebraciones y tradiciones tan bonitas...
Y es que ahora estoy enferma de mundo, es triste ver a un niño de ocho años moneandose
¿A dónde se fue la infancia?
Quien sabe, este mundo de globalización y tecnología nos aleja cada vez más.
Que me importa :( seguiré recordando

Buena noticia

Hay un punto que no quiero tocar,
algo de ti que voy a evitar.
Escojamos entre los datos perdidos nuestro aniversario,
entre la gente sin rostro, el amor.
Déjame conquistar la parte más solitaria de ti,
escarba entre tus pesadillas hasta encontrar mi cuerpo,
arrepiéntete de ti, de mi, de lo prohibido.
Voy a dormir a vivir de quimeras,
Voy a eludir tus palabras,
para quedarme amarrada a tu mano.
Sin voz, con un severo mohín sabrás
que después de ti, no tengo a  dónde ir
Has llegado
y que me dejes no resulta ser una buena noticia.

Verónica Rodríguez

Cariño

Colapso,
nadie se mueva!
Me estoy quedando ciega,
tengo frío,
pero aún puedo verte salir,
te observo regresar.
Ruega a tus demonios que esto pare de una vez.

Siéntete aliviada cariño,
todo fue un sueño que quise vivir,
todo fue una ilusión dulce y opaca

Verónica Rodríguez

Salvaje

Vamos a caminar, para explicarte que tú no entiendes

que mi forma de amarte es más chueca que mis manos.

Más deforme que el amor que hay en el mundo

y la paz que se esconde en la violencia.

Quiero escucharte,

este silencio me atemoriza,

me toma entre sus dientes

para después escupirme

como a carne podrida.

Nuestro amor es una ecuación irresoluble,

la raíz de dos,

es un número pi.

Procura admirar mis trozos más enfermos,

para que siempre tengas algo que extrañar.

Siempre te prometes no cometer las mismas barbaridades,

no volver a abrir la boca,

o dejar que escapen ideas demoniacas y dolorosas,

y aquí estoy otra vez, escuchándote, creyéndote, deseándote,

quizás es que siempre creí nacer en un cuento.

Quiero agotarte tanto que cuando te marches de mi morada

no puedas pensar en nada, no puedas jamás volver a querer a nadie,

que tomes tu cabeza ya sin fuerza y la quieras estrellar.

Vamos a caminar,

tomados de la mano,

oliendo a cigarro

y amándonos, amándonos

de la forma más salvaje que menos puedas imaginar.

Quiero que te corporices de entre mi gente,

mirando a la nada y queriéndome a mí.

No vengo a buscar culpables,

no vengo a señalar,

vengo a ver mi paisaje desde aquí,

quiero entender por qué no te acercas.

  

Algo....ó ¿Alguien?

Sentada, a solas conmigo,
sobreviviendo entre los escombros que dejaste.
Los cigarrillos no alcanzan,
las lágrimas no apagan nada
y sin duda estoy cada día más seca.
Terminaré por abandonarme,
ahogar lo que tengo de ti y lo que queda de mí.
Tal vez entre sueños me extrañas,
súplicas tanto como yo lo hago,
tal vez estas derrumbado,
tal vez es que siempre me ha gustado sentirte tan desgraciado como yo.
Ahora me recuesto y observo aquella estatua que formé con tus sombras,
parece que me llama, que me mira,
parece que quisiera verme así,
ante esta depresión me vigila sonriente.
Sabes que nunca fui capaz de cargar con mis errores,
no sola, tampoco con nadie, solo tú.
Extraño cada una de las imperfecciones de tu cuerpo,
de tu esencia.
¿Extrañas verme llorar?
Las ideas me consumen,
las horas se aferran a pasar lentamente por mi puerta.
La única verdad que me queda es mi reflejo
estoy realmente sola.
Me repito lo que nunca fui capaz de gritarte,
abrazo las cosas que me gustaría tener.
Y ahora que nada tengo,
que todo me hace falta, y que todo esta de sobra,
voy a fumarte.

Inventando

Todo es tan facíl,
no te vayas,
aun no llega la noche,
la tarde apenas cae.
Nos falta el café y las canas.
los días sin contacto y mucha charla.
Quiero queanuncies mi muerte,
quiero que vivas mi vida.

...

Vamos a pensarlo
tu mundo sin mí,
mi mundo sin ti...
vamos a matarnos!

Me quitaré el polvo de la cara,

Una capa sin inicio, ni fin.

Me veré fugaz y  marchita,

Asegurando a tu llegada mi más reciente soledad.

Sólo quiero abrirme un camino,

Sin huellas ni retrasos.

El día se ensangrienta y tú sales de entre las sabanas.

Estoy colgada de las ventanas con las rodillas destrozadas y el alma sucia.

Espera un poco y sigue las sombras que se separan de mí, esta soledad vuela desde lejos y viene con algo de ti.

Quiero que todo calle, para poder arrepentirme, para poder susurrarte todas las mentiras posibles del mundo, todas las verdades que jamás existieron y contarte mis cuantos parados sumergidos en mi intranquilidad, mis cuentos sin princesas, ni finales, sin caballos, sin serpientes, sin esperanza ni retratos.